Z-OO

Este fin de semana J. y yo fuimos al Zoológico Guadalajara (sorogicoguararajara, como diría Sebastián, uno de los niños de los que fui niñera)... total que tenia mucho que quieríamos ir y pues el fin de semana pasado fuímos y hasta nos dimos el gusto de pagar 15 pesitos más por cabeza para entrar a un ala que se llama Masai Mara, que intenta ser una recreación de la sabana africana...

El caso es que Janette nunca había ido y yo sí, pero cuando fuí estaba bien puteado y los animales no se veían nada contentos, así que llegamos, nos subimos al camioncito y nos llevaron a dar la vuelta por un (no) extenso territorio. Vi cebras, avestruces y jirafas.

Mi amor alimentó a una jirafa mientras yo le tomaba fotos.

chingón no?

JAJAJA

De risa burlesca. Hoy por la mañana muy temprano me levanté, como nunca, a las siete am… el punto: ir a buscar una fotografía que imprimí ayer de mi dándole un beso a ella, y que por error deje sobre el escritorio de mi oficina… con el temor de que la niña que trabaja conmigo, Viri, la viera… cabe mencionar que ella no sabe que ando con J. por cuestiones de seguridad laboral o lo que es lo mismo: a quién chingados le importa!

La foto en cuestión.

Total que llegué donde me deja el camión, tomé un taxi y encima el ruquito se fue bien pinche lento así que pagué más de lo que tenia contemplado y pues valió madre el varo pal chesco…

Recogí la foto, la escondí, me acomodé y trabajé hasta poco pasadas las seis, creyendo que mi objetivo se había cumplido.

Dramatización:

Viri: Oie no encuentro un sobre.

Yo: Deja te ayudo a buscarlo.

Viri: Ah! Esto es tuyo – dijo, trayendo una hoja en las manos-.

Yo: Gracias… - con los ojos bien abiertos mientras el movimiento de su mano me revelaba la misma foto pero en blanco y negro –

Ayer la imprimí porque creí que se vería más bonita… pero se me olvido recogerla.

PLOP!

Moraleja: Las mentiras no son para siempre… sobretodo si se es desmemoriado